Cómo usar remedios de hierbas para la rosácea

Creado por Oscar Avila, Rosy Guerra

La Rosácea es una enfermedad crónica de la piel caracterizada por enrojecimiento facial o enrojecimiento por vasos sanguíneos agrandados justo debajo de la piel, ocasionalmente acompañada de granos. Muchos pacientes de rosácea puede que quieran evitar el tener que usar metrogel (metronidazole) o antibióticos orales (tales como tetraciclina, minociclina, o doxiciclina), o puede que los consideren insatisfactorios. Este artículo discutirá el uso de remedios de hierbas como una alternativa para tratar la rosácea.

1 Come saludablemente. Las deficiencias nutricionales pueden exacerbar la rosácea. Elimina en la medida de posible aquellos alimentos que contengan grasas trans, sirope de maíz alto en fructosa, azúcar, y alergenos comunes como el maíz, , lácteos, gluten, frutos secos, de los cuales, se sabe que disparan las erupciones de rosácea.

Come muchos cereales integrales, almendras, y vegetales de hojas verde oscura, las cuales contienen vitaminas B que son antinflamatorias.
Come frutas y vegetales, tales como ciruelas, granadas, pomelos, arándanos, , grapes, grosellas, zuchini, cerezas, manzanas, remolachas, col rizada, espinaca, brocoli, y cebollas, las cuales son ricas en antioxidantes bioflanoides para fortalecer las arterias y venas y evitar que se dilaten y causen rosácea.
Come pescado rico en Ácidos Grasos Omega 3, tales como salmones silvestres, mero, y sardinas, tres veces por semana.

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Aplícate aceite de alcanfor (Cinnamonum camphora) en las áreas afectadas de tu piel, después de haberte lavado la cara. El aceite de alcanfor es fácilmente absorbido por la piel y tiene efectos calmantes, analgésicos y antimicrobianos. El aceite de alcanfor ha sido estudiado para el tratamiento de los ácaros Demodicid que a menudo infectan las áreas de la piel que estén afectadas por la rosácea. En un estudio por El-Shazly et al (2004), los pacientes de rosácea, con o sin infestación de Demodex folliculorum, fueron tratados diariamente con 1/3 de aceite de alcanfor diluido con glcerol y 500 mg de metronidazola por 15 días, con buenos resultados y sin efectos adversos. Este estudio NO prueba que el aceite de alcanfor es efectivo. (podria haber sido que el metronidazol, o metrogel, fueran suficientes por sí solos). Debes ser cuidadoso con el uso de aceite de alcanfor, ya que, puede irritar la piel. También úsalo con moderación ya que alcanfor puede causar toxicidad reversible hepática en casos extremos.
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Prueba con compresas frías de camomila (Matricaria recutita y Chamaemelum nobile). Pon a remojar una buena cantidad de camomila pura o varias bolsas de té de camomila en tres tazas de agua hirviendo por 10 minutos, luego refrigéralo. Cuando necesites una compresa fría, empapa un trapo de algodón en la camomila y aplícala al área afectada hasta que sientas alivio. La camomila puede también ser usada como un ungüento o crema aplicada a la piel.
- Los ingredientes activos de la camomila incluyen los terpenoides (bisoprolol, matricin, camazuleno) y flavonoides (apigenina, luteolina). La camomila puede producir efectos calmantes y anti-inflamatorios y es comúnmente usado en productos cosméticos y para compresas de alivio. Ten precaución ya que la camomila, también tiene coumarina, un anticoagulante natural, o "antiespesante de la sangre). NO tomes camomila si estás usando warfarina, o si tienes problemas de sangrados. En casos muy raros, la camomila puede causar reacciones alergicas, incluyendo erupciones de la piel, inflamación interna de la garganta, falta de aliento, y anafilaxia.
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Aplica al área afectada una crema para la piel que contenga altamisa o santamaría.(Tanacetum parthenium) to the affected area. La altamisa reduce la inflamación inhibiendo 5 lipoxigenasa y ciclooxigenasa, resultando en una disminución de la agregación plaquetaria. El extracto de artemisa contiene partenolida, un potente sensibilizador de la piel. En un reciente estudio de Sur et al, fue hecho un extracto de artemisa con contenido de partenolida rebajado (PD-Artemisa), al ser probado por su efectividad en el tratamiento de condiciones inflamatorias de la piel, se encontró que redujo la inflamación y el enrojecimiento de la piel inducido por la vasodilatación (mecanismo similiar a lo que sucede en la rosácea), lo que sugiere que este extracto de artemisa rebajado en partenolida podría ser un remedio de herbal apropiado para la rosácea.
- No uses artemisa si estás embarazada o dando pecho, o en niños menores de dos años. Los efectos secundarios podrían ser: aftas, irritación oral o inflamación, pérdida del gusto, hinchazón, naúsea, nerviosismo, y malestar estomacal. Si has usado artemisa por más de una semana, asegúrate de dejar de usarlo gradualmente, ya que cesar de usarlo abruptamente puede causar síntomas de abstinencia, tales como dolor de cabeza, ansiedad, fatiga, rigidez muscular, y dolor de las articulaciones.
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Aplica Aceite de Lavanda (genus Lavandula) para limpiar las áreas afectadas de tu piel . Lava tu cara y séquela. Aplica una pequeña cantida de aceite de lavanda a tu cara para ver si eres alérgico . La lavanda contiene geraniol, el cuál puede irritar la piel de algunas personas con rosácea. Si te sale algún enrojecimiento, no lo uses. Si no, empapa una mota de algodón con aceite de lavanda, y suavemente masajea en el área afectada de tu piel. Repite esto diariamente. El aceite de lavanda tiene propiedades antiséptica y antiinflamatorias, pero debe ser usado con precaución porque puede causar alergias.
- NO ingieras LAVANDA, especialmente durante el embarazo o la lactancia. Los efectos secundarios son raros, pero pueden incluir naúseas, vómitos, dolor de cabeza y escalofríos.
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Usa Té Verde(Camellia sinensis). Además, crema de infusión de té verde dos veces al día en las áreas afectads de la piel. El té verde contiene epicatequina, epigalocatequina, epicatequina galato-3-, y galato de epigalocatequina-3-, que tienen propiedades anti-cancerígenas, anti-inflamatorio, antioxidante y propiedades fotoprotectoras, esta última especialmente útil contra la rosácea, ya que lasensibilidad al sol es un sello distintivo. El extracto de té verde puede también reducir los transtornos de la barrera de la pìel observados en la rosácea. Si no puedes encontrar crema de infusión de té verde, puedes probar con el método explicado para las compresas de camomila esxpicado en el punto anterior.
- Evita usar té verde si estás embarazada o amamantando, o si tienes problemas del corazón, problemas de riñon, úlceras estomacales, o desordenes psicológicos (particularmente ansiedad, que puede ser exacerbada por la cafeína en el té verde). Consulte antes con su doctor.
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Aplicáte un gel que contenga regaliz (Glicirricina) a las áreas afectadas de la piel dos veces al día . El ácido glicirricinico, se ha demostrado que es útil par combatir la dermatis. En un estudio de Saeedi et al (2003), el gel de ácido glicirricinico del] 2% reduce significativamente el eritema, edema y la picazón en pacientes con dermatitis atópica después de un tratamiento de dos semanas.
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Frota avena en las áreas afectadas. La avena limpia, humecata, alivia la irritación, calma la picazón y actúa como un anti inflamatorio para tratar la rosácea. La avena también protege la piel y amplia sus barreras, ya que las proteínas y polísacáridos presentes en la avena se pegan a la piel para proveerle de una barrera protectora, mientras que se las proteínas almacen tanto los ácidos como las bases.
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Aplica aceite de árbol de té (Melaleuca alternifolia) a las áreas afectadas de la piel. El aceite de árbol de té tiene propiedades tanto antisépticas como antiinflamatorias. Puede matar gérmenes resistentes a la meticilina, vancomicina, y otros antibióticos. El aceite de árbol de té contiene más de 100 componentes, ayormente monoterpenos, sesquiterpenos y sus alcoholes, tales como terpinen-4-ol, que es responsable de la mayoría de la actividad antimicrobiana. Usa aceite de árbol de té con precaución, ya que puede tener efectos secundarios como dermatitis de contacto alérgica, dermartitis de contacto sistémica, eritemas, y reacciones de hipersensiblidad sistémica así como condiciones médicas tales como la enfermedad de la Inmonoglobulina A linear.