La reflexología podal es una técnica terapéutica basada en la estimulación de puntos sobre los pies, denominados zonas de reflejo.
Supone la aplicación de un masaje manual que aplica presión en áreas reflejas de los pies para producir efectos específicos en otras partes del cuerpo.
Supone la aplicación de un masaje manual que aplica presión en áreas reflejas de los pies para producir efectos específicos en otras partes del cuerpo.
Origen de la reflexología podal
La reflexoterapia es una técnica milenaria con orígenes en la antigua China, Egipto y en las tribus de los Estados Unidos. Se han encontrado papiros en Egipto que datan del año 2000 a. de C. en los que se muestra la aplicación de masajes en plantas de pies y en manos. Los egipcios descubrieron que había partes y órganos del cuerpo que tenían un punto reflejo en la planta de los pies y, al estimular cada uno de estos puntos se producía una sensación de alivio.
En Estados Unidos, los indios Cherokees de Carolina del Norte aplicaban masajes sobre los pies como parte de una ceremonia sagrada, pues creían que los pies al ser nuestro contacto con la tierra formaban también parte de las energías que fluyen de ella.
La reflexología moderna nace a principios del siglo XX de los trabajos del médico estadounidense William Fitzgerald, que observó que la aplicación en determinadas áreas de pies y manos provocaron efectos anestésicos en otras partes del cuerpo. Con estos descubrimientos, estableció que el cuerpo humano se halla atravesado, en sentido longitudinal por diez meridianos, cinco en cada mitad del cuerpo, sugiriendo que existe una relación directa entre las diferentes áreas y los distintos órganos del cuerpo.
Beneficios de la reflexología podal
La reflexología aplicada en los pies es una terapia que nos puede ayudar tanto a prevenir diferentes síntomas y dolencias como para conseguir un equilibrio físico y mental. A continuación cito algunos de los beneficios generales que podemos conseguir con la reflexología podal:
- Es relajante.
- Alivia el estrés.
- Activa la circulación sanguínea.
- Afloja las contracturas.
- Mejora la calidad del sueño.
- Activa el sistema inmunológico.
- Favorece mecanismos de depuración y eliminación de toxinas.
- Equilibra los distintos sistemas.
Contraindicaciones de la reflexología podal
Aunque en un principio la reflexología podal no tiene contraindicaciones hay casos en los que no es recomendable su aplicación. Estos casos son los siguientes:
- Procesos agudos de fiebre.
- Osteoporosis del pie o pierna.
- Enfermedades isquémicas del corazón (angina de peco, infarto de miocardio,…)
- Embarazos con riesgo de aborto.
- Infecciones agudas en general.
Como hemos podido observar la reflexología podal, es una terapia natural que aporta multitud de beneficios a nuestro cuerpo. No obstante, no está exenta de contraindicaciones, las cuales debemos valorar antes de realizar el tratamiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario